Portear a tu bebé; la mejor protección

Cuando porteamos a nuestro bebé la gente nos pregunta si ahí van seguros. Son muchos los comentarios que recibimos los papás porteadores: ¿No se va a asfixiar ahí?,  !Le llevas demasiado apretado!,  tiene que estar incómodo, o ¿no lleva ahí demasiado tiempo?

La imagen de nuestro bebé tranquilo, durmiendo apaciblemente durante largos periodos de tiempo es la respuesta; si un bebé está incómodo lo deja notar enseguida.

Son muchas las situaciones en las que portear a tu bebé (correctamente colocado y en posición ergonómica), lejos de ser un peligro o incomodidad para él, es una protección. Siempre y cuando tengamos en cuenta unas recomendaciones para portearle con seguridad:

Con tu bebé pegado a tu pecho, sabes que está bien

En un portabebé ergonómico, correctamente colocado, la cabecita del bebé queda a la altura de nuestros besos y sabemos que está perfectamente, notamos su respiración y su latido.

Cuando el bebé está separado físicamente de nosotros o en otra habitación, es instintivo al principio asomarnos para ver si está bien y respira. Llevar a nuestro bebé pegado a nosotros nos ofrece la tranquilidad de saber cómo está en todo momento.

Portear a nuestro bebé le protege de manos indiscretas

A veces algunas visitas indiscretas quieren a toda costa coger al bebé, hay suegras, abuelas, tíos que no parecen reconocer que el bebé está placidamente descansando con quien necesita estar: sus padres. Portear al bebé le deja fuera del alcance de esas manos, a las que a veces no sabemos cómo detener.

Protección frente a posibles accidentes

Aunque no es algo frecuente puede ocurrir que suframos un tropiezo o caída paseando con nuestro bebé. Si le llevamos en un portabebé tenemos las manos libres para intentar frenar la caída, si le sostenemos con nuestros brazos es más complicado reaccionar.

Siempre que llevamos al bebé pegado a nuestro cuerpo, nuestra capacidad de reacción va a ser más rápida.

Protección frente a inclemencias meteorólogicas

Pegadito a nosotros el bebé está protegido del frío y de la lluvia con nuestro calor corporal. Es una sensación maravillosa pasear con tu bebé dormido en tu pecho bajo la lluvia o la nieve.

 

Recibe los estímulos de su entorno desde una posición de seguridad

Es fundamental para el desarrollo cerebral de nuestro bebé, tan importante durante el primer año de vida, recibir los estímulos adecuados. Estos estímulos  están en nuestro ambiente, cuando llevamos a nuestro bebé en un portabebé podemos seguir realizando muchas de las actividades que hacíamos antes(siempre que no sean peligrosas) y nuestro bebé queda en una privilegiada posición de seguridad.

Portear les protege del ruido exterior, permitiendo un sueño más largo y reparador

Cuando estamos en lugares ruidosos y es la hora de la siesta, o tenemos hijos mayores que hacen ruido, el bebé, sobretodo a partir de los dos meses, puede tener dificultades para conciliar el sueño o se despierta a los 5 minutos.

Pegado a nosotros, nuestro bebé consigue dormir durante periodos de tiempo mucho más largos.
Si quieres saber más sobre cómo portear a tu bebé, puedes acudir a un asesoramiento personalizado ó a nuestros talleres gratuitos.

 

 

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.